4 chuletas de cerdo con hueso
50 g de tocino
40 g de trufas
4 fetas de jamón crudo
pan rallado
4 echalotes
salvia
romer
aceite de oliva
sal y pimienta en negra

Se pican en el robor el tocino, las trufas y algunas hojitas de salvia.
Se limpian de grasas las chuletas y se abren por la mitad en forma de libro sin separar las dos partes del hueso, se salpimentan al gusto, se pone en el interior de cada una loncha de jamón y la cuarta parte del picadillo anterior.
Se cierran las chuletas y se atraviesan con un palillo por la parte central, cogiendo también una hoja de salvia, de manera que queden unidas ambas partes, se rebozan bien las chuletas con el pan rallado, ejerciendo presión para que se adhiera bien.
Así se freíran mejor.
Se calienta un chorrito de aceite y se rehoga los echalotes troceados, se añaden una ramita de salvia, otra de romer y unos granos de pimienta y se fríen en una sartén las chuletas a fuego moderado en ese aceite, se les da una sola vuelta alos 7 minutos aproximadamente, cuando estén bien doradas por un lado, y se dejan otros cinco minutos más.
Entonces se casan las chuletas al mesa, salseadas, previamente con su propio jugo.